Resguardo Personal

En Resguardo Personal, escrito por Paloma Pedrero, la pregunta de ¿Dónde está Nunca la perra? se parece causar casi toda la trama en la obra, ya que presumiblemente viene Gonzalo por recogerla. Por un lado, sí, Nunca juega un papel importante en la obra y su existencia solicita reacciones de los dos personajes. Por otro, Nunca solo es una herramienta de venganza por los dos. Claramente, Gonzalo no busca a Marta por Nunca; dentro de diez líneas de esta en el apartamento él aprovecha de la situación para tratar de arreglar asuntos con su esposa y disculparse. Igualmente, Marta se aprovecha de Nunca para liberarse de Gonzalo. Dado la posición de Marta, la podemos disculpar de su maltratamiento a Nunca debido al hecho que ella tiene que escapar.

Sin embargo, en el caso de Gonzalo, su uso claro de Nunca como una fachada para hablar con Marta refleja su patrón de tratar de disculparse cuando claramente tiene culpabilidad en su relación. No quiere enojarse con Marta, a pesar de que sí, se enoja; no quería ser malo esposo, pero tenía que ser así por su trabajo; y finalmente, no quiere la muerte de Nunca, pero sí tiene que pasar debido a las acciones de Marta.

Cifra

¿Qué podemos nosotros sacar del poema “Cifra”? Hasta ahora no hemos leído un poema tan sencillo como “Cifra”, con tan pocas palabras. Es cierto que el otro poema concreto hemos cubierto “La capilla aldeana” depende mucho menos en su estructura, ya que tiene más que cinco palabras distintas. Sin embargo, la falta de palabras solo hace más difícil la vida de los lectores y deja más a la imaginación que el poema típico.

Claro que yo no puedo adivinar un significado, si lo tiene. Al leer el poema en voz alta, creo que yo sí puedo adivinar algo de lo que trata de lograr. Empiezo al como al derecho de cifra y leo las palabras en dirección en el sentido horario por que es la primera palabra en el sentido correcto. A mi me parece que el sonido del poema muere al fin al leer “cifra.” De repente, después de siete palabras en las que el lector solo usa sus labios para pronunciar las m´s, tiene que llevar sus dientes al labio inferior para la f. Al aparecer cifra después de tales ideas intangibles como “calma” “cero” y “colmo,” el lector siente un movimiento en el contento del poema a la imperfección de la realidad. Aun así, la naturaleza cíclica de leerlo subraya la habilidad de todos estos aspectos en coexistir.

“A su retrato” y su alusión a Góngora

Es obvia la conexión entre “A su retrato” escrito por Sor Juana Inés de la Cruz, y “Soneto CLXVI” escrito por Luis de Góngora. Vemos las palabras “polvo…sombra…nada” en los últimos versos de los dos para representar la fugacidad de la vida. Además, los dos poetas utilizan repetición de palabras cortas que preceden polvo, sombra, y nada: en el caso de Góngora el usa “en,” de Sor Juan, “es.” Esta repetición enfatiza la gravedad de la muerte que los poetas tratan de lograr en sus poemas. Sin embargo, la alusión a Góngora por Sor Juana lo hace que tengamos que considerar las diferencias subrayadas entre los poemas. Al relacionar su poema con lo de Góngora, ¿Está igualando Sor Juana la vida con el arte; ambas como temas sin propósito? Al mismo tiempo de enfatizar la importancia del arte, ya que la gente suele creer que la vida es importante, Sor Juana lo baja para que el lector entienda que en vano.

Por supuesto, podría ser que yo esté completamente incorrecto con este análisis especialmente cuando consideramos que Sor Juana era monja y por eso tenía que creer en algo de la vida como importante. Otra interpretación es que con este poema ella escribe en contra de la idolatría o simplemente el arte que solamente tiene valor estético. Aunque, dado el contento “A una rosa”, me parece que de lo primero en vez del segundo.

¿Por qué avanza más la narrativa con Lázaro que con Angela?

Es interesante que, a pesar de la relación cerca que tiene Angela con Don Manuel, Unamuno no revele la historia y el sufrimiento de Manuel hasta que llega Lázaro. Claramente, Angela no cabe adentro de los papeles tradicionales de una mujer: ella asistía una universidad antes de volver a la aldea, y profesa varias veces que no se quiere casar. Dado las esfuerzas que Unamuno da para enfatizar la independencia y la habilidad de ella, una persona supondría que ella sería la una quien descubre los dolores de Don Manuel.

Sin embargo, eso no es el caso y al llegar la narrativa del cuento esencialmente se convierte en la de Lázaro en vez de la de Angela. ¿Por qué pasa este? ¿Por qué escoge Unamuno Lázaro como la persona quien mueva la trama? Una repuesta posible es debido a la doctrina católica, donde los curas no pueden ser mujeres, y por eso Angela por el género nunca podrá desarrollar el mismo lazo con Don Manuel como su hermano. Otra respuesta posible es que Don Manuel se siente más cómodo en compartir sus conflictos internos con Lázaro ya que él es un hombre quien también puede entender la experiencia de quedar con dudas en su fe, pero sigue rezando y practicándola por el bienestar de otros.

Me imagino que al final del cuento Angela vaya a jugar un papel más importante, porque seguramente que Unamuno escogió a ella como la narrador en vez de Lázaro por una razón.

Las medias rojas y el naturalismo

Lo que me fascina más sobre el cuento de Bazán es cómo ella puede tratar de una existencia tan bucólica y pobre a pesar de que ella fue un miembro de la clase dirigente. Creo que su estilo del naturalismo la ayuda para lograr a superar su falta de experiencia afuera de su realidad aristocrática en “Las medias rojas.” En vez de caerse en la trampa de glorificar la vida simple de los campesinos, como han hecho muchos autores de su misma clase, ella se esfuerza por la representación vida ni buena ni mal, pero real. Aunque, sí es claro que el cuento le falta felicidad por su fin, me parece que hay, o por lo menos había momentos de esperanza verdadera para la protagonista antes de su asalto. Escribe Bazán que la protagonista tiene el sueño de ir “a lo desconocido de los lejanos países donde el oro rueda por las calles” ahora que ella ha “cumplida la mayor edad, libre de la autoridad paterna” (52). Las palabras brillantes de esta mitad de un párrafo contrastan con el resto de la imagen generalmente lúgubre del cuento. Dicta el realismo que la fidelidad a la realidad sea la más importante, y lo aprovecha Bazán para que pueda esconder algunas inclinaciones que quizá tenga por su experiencia académica. Por eso, las vidas de los personajes no están hechas parecer atractivas, sino tampoco triste más allá que es creíble.