Federico García Lorca crea un personaje muy fuerte y poderosa en su caracterización de la matriarca Bernarda. El dinámico en la casa de Bernarda es muy tenso porque Bernarda tiene mucho control sobre el resto de las mujeres en la casa. García Lorca crea una transición en la escena en que Bernarda no está presente en la escena a la situación en que Bernarda está comunicando directamente con otras personajes. Es interesante ver la diferencia en las reacciones de las varias personajes a la personalidad y papel de Bernarda en la casa si Bernarda está presente en la escena o no. Acto I tiene un alcance de personajes diferentes, como las criadas, las hijas, y la madre de Bernarda, que está atrapada detrás de puertos bloqueados. Cada de los grupos de las mujeres tienen una relación diferente con Bernarda, y es evidente en el diálogo entre Bernarda y ellas. Por ejemplo, las criadas tienen una visión de Bernarda muy negativa en general porque toman mandatos y opresión directamente de Bernarda. Antes del entro de Bernarda en la escena, las criadas la insultan, pero también sus miedos de ella son muy evidente. Pero, cuando están en contacto con Bernarda, las criadas son muy obedientes y se refieren a sí mismos como “perras” para demostrar su obediencia as la poder de Bernarda. Bernarda ejerce su control sobre las criadas por su establecimiento de sus expectaciones cuando le dice a las criadas “me sirves y te pago. ¡Nada más!” Bernarda establece relaciones muy formales con las criadas y su familia también. Hay una instancia cuando una de sus hijas, Angustias, dice “qué manda usted?” a su madre. Está interacción es muy formal para una relación entre madre e hija, pero revela la intimidación de todas en lo que respectaba a las mandatos de la matriarca. Bernarda es muy estricto y duro y tiene altos estándares para su casa y sus hijas. Bernarda permanece muy misterio en relación a su pasado y también mantiene un comportamiento muy grave. La tema de opresión y poder es muy evidente por todo de Acto I, particularmente en las interacciones entre Bernarda y el resto del las personajes.
2 thoughts on “El poder de Bernarda en la casa estricta”
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Pienso que el poder y papel que Bernarda tiene en su propia casa representa el ambiente político en España durante la publicación de esta obra. Aunque la guerra civil no empezó hasta dos meces después de la terminación de esta obra, los lectores pueden relacionar el poder de Bernarda y su control totalitario a las situaciones que están presente en España antes de la guerra. En la clase nosotros discutimos mucho sobre los eventos que ocurrieron antes de la guerra y las causas de esta división. En un país con mucha tensión, las personas que resistieron el gobierno fue exiliados y matados. Como en este gobierno, Adela resistió el control y reglas que Bernarda impone y consecuentemente murió a la resulta de su oposición. En su obra, García Lorca enfatiza esta opresión de las opiniones a través de la actuación de Bernarda en su casa. Esta opresión y revuelta contra la opresión es evidente en las conductas de los personajes en la presencia de Bernarda y cuando ella no está en la misma cuarta. Su poder y control sobre su casa es demostrado en el acto final con la muerte de Adela cuando ella dice “¡Mi hija ha muerto virgen!” aunque ella perdió su virginidad a Pepe el Romano. Bernarda tiene la habilidad a controla los hechos en su casa, como un líder totalitario. Pienso que García Lorca da a Bernarda mucho poder para recrear las condiciones del gobierno español en su obra
Estoy de acuerdo con las ideas del poder representando el poder del gobierno en España durante este época. Es como una dictadura, y a pesar de que este libro ha escrito antes de la guerra civil, es como una presagia de qué va a pasar en el futuro de España. En clase, mi grupo discutimos sobre las temas del silencio, las lágrimas, y la tiranía en relación al gobierno en España. Por ejemplo, hablamos sobre el silencio y cómo lo representa la opresión de la gente, y cómo las lágrimas expresa esas sentimientos que la gente no puede expresar. Bernarda dice “Magdalena, no llores; si quieres llorar te metes debajo de la cama. ¿Me has oído” (122). Aquí, Magdalena quiere llorar, pero Bernarda le critica rápidamente. Bernarda representa la dictadora que va a ocurrir y cómo ella (o el gobierno) no quiere ella (o la gente) a sentir mal. La tristeza no se permite, sólo la obediencia. Por eso, el silencio es presente. Cuando Bernarda está por aquí de sus hijas, son obedientes. Pero, cuando ella no está allí, sus hijas le critican muchísimas. Esto es relacionada a la tiranía de Bernarda en su casa y el poder del gobierno también. Si ellos no quieren una cosa, nadie puede hacerlo. Pero en secreto, la gente expresa sus sentimientos sobre la situación. También al fin, Bernarda dice “Ha muerto un virgen,” (205) representando que ella no sabe todas las cosas que su hija hizo antes de su muerto. Pero, Bernarda tiene una expectación y asumir que ella la hizo, como las reglas del gobierno en España. Irónicamente, en realidad, Bernarda (o el gobierno en España) no sabe nada sobre su hija (o su gente).