¿Religión verdadera? Todas las religiones son verdaderas, en cuanto hacen vivir espiritualmente a los pueblos que las profesan, en cuanto les consuelan de haber tenido que nacer para morir, y para cada pueblo la religión más verdadera es la suya, la que le ha hecho. ¿Y la mía? La mía es consolarme en consolar a los demás.
Don Manuel dice esto a Lázaro y Lázaro lo repite a su hermana, Angelina. Esta cita es muy interesante porque usualmente personas discuten cual religión es correcta en el sentido que la religión correcta es la que describe el mundo mejor. Por ejemplo, muchas personas no están de acuerdo con el cristianismo porque, a estas personas, los eventos de la biblia no están apoyados por los hechos científicos. Pero Don Manuel sugiere que la felicidad es más importante que la verdad. Él cree que el propósito de la religión no es explicar el mundo, pero difundir la alegría. Por lo tanto, el propósito de la religión es esconder la tristeza y crueldad del mundo de las personas. Si personas supieran esta verdad, Don Manuel piensa que no vivirían (en sentido figurado y literal).
Otra observación intrigante de esta cita es lo que Don Manuel dice su propósito es: consolarse en consolar a los demás. Básicamente, él distraerse por distraer todas las otras personas. Cuando él llora, llora porque sabe la verdad–que no un dios. Es muy irónico porque la persona quien convenció todo el pueblo que debe creer no cree, y también la persona que piensa que la felicidad es tan importante llora a menudo.
de Unamuno, Miguel. San Manuel Bueno, mártir.